Desde hace cierto tiempo venimos constatando una deformación de nuestro horario de trabajo. Deformación que tiene varias causas, pero la fundamental, son las necesidades de las empresas contratistas de acumular ganancias en un breve tiempo, a costa del salario/horario/produción del trabajador.Si el salario es bajo, las empresas “seducen” al trabajador a superarlo a través de la realización de trabajo “extra”.Fijan entonces las condiciones para superar el salario base, siendo éstas según cada empresa, pero bajo un denominador común : productividad arbitraria.Es como la Fábula del Conejo y la zanahoria. Cuanta mas alta es la productividad mínima a alcanzar, más trabajo -en un extenso horario- debemos realizar. Pagándonos por la diferencia entre el mínimo exigido y lo que se supera, a escasos euros.Pero además de esto, no existe un control objetivo e imparcial de lo que se produce, quedando a manos de la “discrecionalidad” de la empresa de turno, e incluso del personal que administra.Pero en todo esto hay además un grave inconveniente. No existe un estudio objetivo, hecho por una “consultora” independiente, que determine los tiempos en cada situación. CONCLUSIÓN.TERMINAMOS ADECUANDO NUESTRO HORARIO A LA PRODUCCIÓN EXIGIDA y NO, COMO SERÍA RAZONABLE, ADECUAR LA PRODUCCIÓN A NUESTRA CARGA HORARIA. ES DECIR A LA OCHO HORAS.Todos o casi todos sabemos que es prácticamente imposible llegar a los puntos dentro de un horario qué incluye, los tiempos de traslado desde el centro de trabajo y al que además sumaremos para llegar hasta el cliente.
A modo de simple ejemplo. Si tenemos que trasladarnos desde Girona (Salt) a Roses, el tiempo entre la ida y la vuelta sumará una hora y media aprox. Si le sumamos unos 20 o 30 minutos del mediodía para comer un bocadillo, tenemos un tiempo “improductivo” mínimo de un par de horas. Obviamente cuanto mas cerca más tiempo tenemos útil. Nos queda entonces para el caso mencionado unas seis horas para realizar una productividad promedio de 10 puntos diarios.
Todo lo demás, es puro cuento. Si hay trabajadores que llegan y superan ampliamente la producción mínima no se debe a condiciones normales en la realización del trabajo.TODOS SABEMOS DE QUE HABLAMOS. LAS PALABRAS SOBRAN .
A modo de simple ejemplo. Si tenemos que trasladarnos desde Girona (Salt) a Roses, el tiempo entre la ida y la vuelta sumará una hora y media aprox. Si le sumamos unos 20 o 30 minutos del mediodía para comer un bocadillo, tenemos un tiempo “improductivo” mínimo de un par de horas. Obviamente cuanto mas cerca más tiempo tenemos útil. Nos queda entonces para el caso mencionado unas seis horas para realizar una productividad promedio de 10 puntos diarios.
Todo lo demás, es puro cuento. Si hay trabajadores que llegan y superan ampliamente la producción mínima no se debe a condiciones normales en la realización del trabajo.TODOS SABEMOS DE QUE HABLAMOS. LAS PALABRAS SOBRAN .
